sábado, 16 de mayo de 2015

LA PASIÓN TURCA: novela y película



Creo que la mujer, más que el hombre, está hecha para la aventura transoceánica del amor”, Antonio Gala.
 Antonio Gala Velasco nació en Brazatortas (1930), un pueblo pequeño de Ciudad Real.  El escritor tiene allí una placa que reza: “aquí nació el escritor cordobés Antonio Gala”. Nunca habla de ese pueblo, aunque su padre fue médico de dicho lugar. Quizás sea debido a que se marcho a Córdoba muy niño y no echó raíces allí.
 Tengo que confesar que no es de mis escritores favoritos, pero no hay duda alguna que Gala ha cultivado todos los géneros (periodismo, poesía, novela, relato, ensayo, guión televisivo….) En la actualidad intenta luchar contra un cáncer.

“La pasión turca” me enganchó desde el primer momento que llegó a mis manos, entre otras cosas, porque no hay nadie como Gala para describir las pasiones y los sentimientos de la mujer. La primera parte de la novela te engancha y absorbe. Sin embargo, he de reconocer, que  la acción que trascurre en Estambul se hace pesada en algunos tramos.

Al final no dejas de preguntarte: ¿Cómo se puede perder el juicio de la manera que lo hace la protagonista y abandonarlo todo por un amor egoísta y promiscuo? La novela de Gala nos relata la tormentosa pasión entre Desideria (española) y  Yamán (un turco). Nos habla de cómo ese amor gobernará y destruirá la vida de esa mujer.

La novela está bien narrada y explicada en los cuatro cuadernos en los que Desideria nos desgrana su vida, estando ya viviendo en el país turco. Como es capaz de hacer cualquier cosa por estar al lado de la persona que cree amar. No le importan las humillaciones, los malos tratos o la gran dependencia física y emocional que tiene hacia ese hombre. Las páginas finales de la novela  proceden del relato de Pablo Acosta, amigo de Desideria y que traja para la Interpol.

Desideria es una chica de provincias que se casa con Ramiro, quien es bastante religioso.  Ella cree que tiene una vida acomodada y sin sobresaltos. Su marido no la satisface en la cama ni consigue tener un hijo. Para salir de la monotonía suelen  hacer viajes con bastante frecuencia; acompañados por dos matrimonios amigos (Felisa y Arturo y Laura y Marcelo). El último viaje que realizan es a Turquía. 
Allí  Desideria se enamorará de Yamán  que es, entre otras cosas, el guía turístico del viaje. Entre ambos se inicia una relación sexual muy pasional.
A su regreso a España ya nada será igual en la vida de Desi. Abre una tienda de alfombras con el fin de hacer “escapadas” al país turco, con el único fin de seguir esa relación amorosa. En uno de esos encuentros se queda embarazada. Se lo confiesa a su marido y éste, que no puede tener hijos, acepta ese embarazo siempre que ella rompa con Yamán.
Todo parece ir bien en la vida de Desi, pero a los dos meses de nacer Carlos, éste fallece y, tras el entierro del niño, ella abandona al marido y se marcha a Turquía en busca de Yamán.
Ya en Estambul vivirá con Yamán humillaciones y vejaciones. Incluso se someterá a un aborto y a conocer que no volverá a tener más hijos y todo por conservar a ese hombre. Al final, Desideria no puede aguantar más los celos y la vida que lleva con él y se suicida.

LA PELíCULA

La película la dirigió y adaptó Vicente Aranda en 1994. Está protagonizada por Ana Belén (Desideria), Georges Corraface (Yamán), Ramón Madaula (Ramiro), Silvia Munt (Laura), Helio Pedregal (Arturo), Loles León (Paulina), Francis Lorenzo (Marcelo) y Blanca Apilánez (Felisa), entre otros. El film logró un premio Goya a la mejor banda sonora, compuesta por José Nieto.

Antonio Gala y Aranda no lograron ponerse de acuerdo  con el final de la película.   Aunque se rodaron dos finales, el escritor no ayudó en el rodaje. En la novela Desideria muere y en la adaptación de Aranda, éste optó  por el desenlace en el que ella dispara a Yamán y huye.  Hay que indicar que Vicente Aranda realizó bastantes cambios con respecto a la novela.

El rodaje en Estambul se realizó bajo amenazas de muerte debido a los resquemores de los turcos con algunos aspectos de la novela. Se ha publicado que Aranda contó con la protección de cincuenta policías.
En un principio el director pensó en la actriz Victoria Abril para el papel protagonista, pero al final optó por Ana Belén. Quizás prefirió la sensualidad al erotismo de Victoria.

Ana Belén: contaba con 43 años de edad cuando rodó la película y realmente demostró una gran madurez sexual al interpretar las escenas de alto contenido erótico. Pienso que supo regalarnos todo un recital dramático y erótico a la vez. El papel de Desideria tuvo que ser duro de interpretar, pues a veces encarnaba a una mujer  dura, fría, madura, contradictoria, fuerte y débil, a la misma vez que apasionada, erótica y sensual…pero que al final se da por vencida, llegando a quitarse la vida.

Georges Corraface: interpretó al turco Yaman (El Único). Francés de nacionalidad y, que allá por los años 90, fue objeto de deseo de muchas mujeres y, seguro que, de algún hombre también. En nuestro país era un actor desconocido pero “La pasión turca” lo acercó a nuestro cine y al idioma, pues no conocía el castellano.
Tras el éxito de la película rodó alguna obra más, pero sin tanta repercusión.  Personalmente, no me gustó el personaje de Yamán, quizás por ser un individuo egoísta, maltratador, promiscuo, sin escrúpulos  y que usaba a las mujeres como objetos para su lucro.

Como siempre recomiendo la lectura de la novela y la visualización de la película.



lunes, 4 de mayo de 2015

MITOS ERRÓNEOS SOBRE LA SEXUALIDAD





Parece increíble que hoy en día en nuestra sociedad aún existen mitos o falsas creencias en el terreno sexual. Supongo que es debido a la falta de experiencia o  a la poca información las que hacen que esos errores se crean y hasta pasan de generación en generación. Por suerte para nuestra juventud hoy en día se puede hablar, comentar, indagar o ver todos los temas que tengan que ver con las relaciones sexuales. Algo que en la época de nuestros abuelos o padres era impensable o incluso pecado.
Voy a poner algunos de esos ejemplos tanto masculinos como femeninos. Si conoces alguno más, y te apetece, añádelo a la lista.

Mujer que toma la iniciativa es una inmoral: esto ocurría en la época de mi abuela. Hoy en día hasta a los hombres les satisface que seamos nosotras las que tomemos la voz cantante  en la cama cada vez que nos apetezca.

Sexo y regla no: para gustos..los colores. Eso está en los gustos de la pareja. Antiguamente se creía que si mantenías relaciones sexuales estando menstruando no te quedabas embarazada. Es menos probable pero no imposible.

Si hay embarazo: no debe haber sexo: personalmente, creo que eso debe decidirlo la pareja y el médico que lleva el embarazo. Si todo funciona perfectamente no veo el porqué no debe haberlas. Lo único es que hay que buscar posturas que sean más cómodas para la futura mamá.

El zumo del limón o el vinagre evitan el embarazo: ¡¡¡¡¡¡mentiraaaaa!!!!!. ¿Cómo se puede creer esto? Por mucho que te laves la vagina con el zumo del limón, o con el vinagre o incluso con  las bebidas gaseosas no evitarán que te puedas quedar embarazada si han eyaculado dentro.¡¡¡¡¡¡¡¡Hay otros métodos anticonceptivos muy efectivos!!!!!

Si él eyacula fuera no hay embarazo: hay un dicho que reza así: “Antes de llover siempre chispea”.  El líquido preseminal que se produce entes de la eyaculación contiene espermatozoides. Así que cuidado.

 Ellas deben amar para practicar sexo: ¿esto quién se lo traga? Ocurriría en la España de Franco, que todo era pecado. Una mujer puede y debe mantener relaciones sexuales sanas siempre que le sea posible.

Las mujeres odian el porno: hace años era muy raro que una mujer comprara una revista o libro pornográfico  y mucho menos ver una película. Eso era sólo para los hombres. Hoy en día, dicen las estadísticas que un 66% de las mujeres adquiere o ve porno. Claro que preferimos películas con mejores argumentos y que se cuide la estética.

Ellos saben lo que nos gusta: yo me pregunto ¿son todas las mujeres iguales en cuanto a gustos sexuales? o es que ¿son ellos adivinos?. Pienso que somos nosotras las que debemos darles ciertas pautas sobre lo que nos gusta o no. Nadie nace con un manual debajo del brazo.

El hombre manda en la cama: aysssssssss eso sería hace años.  Entre las sábanas manda quien le apetezca. Hoy puede ser él y mañana ella. Que siempre dirija la orquesta él….puede ser hasta aburrido.

Alcohol y drogas aumentan el placer: ¡¡¡¡mentira!!!!! Todo lo contrario. La excesiva ingesta de alcohol puede generar secuelas graves en el funcionamiento sexual. Pasa lo mismo con lasd drogas, aunque consumidas en dosis muy bajas, aparentemente, aumenta el deseo sexual…pero…ayssssssssss, los daños a la larga son irreversibles.

Masturbarse te afecta: otra falacia. En todo caso te hace disfrutar. Desde los tiempos remotos nos han contado que masturbarse era pecado, que podía tener una disfunción eréctil con el tiempo, que se le caía el cabello, que te salía acné, que podías quedarte sordo y ciego o que te perjudicaba a la memoria…¡¡¡¡¡por dios, pos dios…..qué inocentes eramos!!!! Masturbarse es sano, reduce el estrés, la ansiedad y duermes mucho más feliz.

La vasectomía que te quita las ganas: la vasectomía es una intervención quirúrgica sencilla que realiza un urólogo y se realiza con anestesia local. No produce cambios en el deseo sexual, ni en el comportamiento, ni en la erección, ni en el placer u orgasmo. Por cierto tampoco te quedas calvo….sólo que “endulzas pero no engordas”…