martes, 30 de diciembre de 2014

¿CUÁNTO HA EVOLUCIONADO LA MUJER ESPAÑOLA?

     La equivalencia entre mujeres y hombres es un derecho relativamente nuevo en España. Comenzó a nacer con la Democracia y la aprobación de la Constitución. A lo largo de tres generaciones las cosas han ido cambiando bastante. Mi bisabuela no pudo estudiar ni trabajar. Mi abuela tampoco, aunque sabía leer y escribir lo justo. Mi madre estudió lo básico y trabajó mucho en el campo. Después de la muerte de Franco tuvo la oportunidad de trabajar fuera de casa.


Hasta hace unos pocos años, la ley española le daba total autoridad al marido, que era quien decidía, prácticamente, sobre la vida de la mujer. No existían los anticonceptivos y ser madre soltera era casi impensable de cara a la sociedad.




Hoy en día, la igualdad total y real aún no se ha conseguido, como lo demuestra el alto porcentaje de mujeres que se dedican a las labores del hogar; la diferencia salarial entre ambos sexos y el alto índice de paro femenino.  Además, apenas acceden a altos cargos de responsabilidad.

La mujer continúa asumiendo la mayor parte de las labores de casa y el cuidado de los hijos.
Vamos hacer un recorrido, someramente, cómo ha cambiado la mujer española en unos años:
En el año  1933 las mujeres ejercían por vez primera el derecho al voto. El camino hasta llegar a las urnas no fue fácil. La participación femenina en el mundo social y político fue frenada con la llegada de Franco al poder, con una visión de las mujeres impuesta desde la iglesia católica.



No hace muchos años, nuestro Código Penal contemplaba el derecho del marido a matar a su esposa por ser adultera. Un “derecho” que fue eliminado en 1963. La mujer era excluida de todo lo que fuera público y estaba relegada al núcleo familiar, siendo su misión la de educar a los hijos.

La reforma del Código Civil en 1975 supuso un paso decisivo para nosotras. El deber de obediencia al esposo se sustituyó por el deber mutuo de respeto y protección recíprocos. Con la muerte de Franco (1975) se iniciaba una serie de cambios para la mujer. No hay que olvidar que algunas generaciones de mujeres fueron educadas para ser sumisas, obedientes y entregadas.

La píldora anticonceptiva (que hoy se adquiere sin ir al médico) llegó a España en 1964, pero debió vencer la política natalista del Caudillo y la fuerte oposición de la Iglesia. Su legalización llegaría en octubre de 1978. Durante el tiempo que pasó desde su introducción y su legalización, miles de españolas la usaron, oficialmente, bajo el eufemismo de “regular el ciclo menstrual”.

La despenalización del aborto llegó con el primer Gobierno en democracia. El Ministro de Sanidad, Ernest Llunch, anunciaba en 1983 una reforma del Código Penal. Tras muchos traspiés, por fin en 1985 el aborto en España ya no era delito.



En 1993 se puso a la venta el preservativo femenino, no tuvo la misma repercusión y aceptación que el condón masculino. Seguro que muchos adultos maduros recordarán más de una peripecia que tuvieron que hacer para comprar un preservativo. Hoy en día hasta los hay en el supermercado.


El bikini…aysssssssss nació en el verano de 1964, pero la Iglesia española prohibió su uso. Sin embargo, allá por el año 1952 se introdujo oficialmente en nuestro país de la mano del alcalde de Benidorm, Pedro Zaragoza, que mediante un decreto lo legalizó y a punto estuvo de costarle la excomunión.

Hoy en día, después de 68 años, sigue siendo la prenda de baño más usada de las mujeres, aunque las hay que prefieren el tanga o hacer  top-less.
Los maravillosos años 60 pusieron  fin al clasicismo a la hora de vestir en la mujer. Dejó atrás la típica falda recta por la rodilla  y empezaron a llevar ropa de muchos colores, faldas más cortas o ropa ceñida. Los pantalones comenzaron a llevarse sin problemas, aunque se habían popularizado allá por los años 40.

Mary Quant (diseñadora inglesa) revolucionó el mundo en el 1964 al presentar la mini falda. En la época franquista llevar mini falda era una señal de provocación para las mentes machistas y conservadoras, por lo que se introdujo poco a poco. Ésta falda dejaba al descubierto una de las partes más sensuales del cuerpo de la mujer.

En cuanto a los estudios, hay que recordar que una Real Orden (1910) permitió a la mujer acceder sin demasiados problemas a las universidades.
Sin embargo, el régimen franquista no ayudó a potenciar la integración de ellas a las aulas universitarias. No era necesaria la autorización del padre o del marido, pero pocas tuvieron la oportunidad de estudiar una carrera. Hoy en día los rectorados, cátedras y puestos directivos siguen siendo cosa de hombres.



Por desgracia para las mujeres, aún mueren cada día  a manos de los que dicen amarlas. Este año 2014, la cifra asciende a 59 víctimas en nuestro país.

Aún no se han dado cuenta los hombres que las mujeres no son una cosa, que cogen, usan y cuando les apetece matan. Creo que para desgracia nuestra en España se ha retrocedido.  Se ha eliminado la asignatura Educación para la Ciudadanía, que era la única que incidía en los valores de igualdad, respeto y no segregación por sexo en las aulas.

José Ignacio Wert (para mí uno de los peores ministros  valorados de la Democracia)  se encargó con su ley de suprimirla. Si no ponemos remedio a tiempo  a esto ¿qué estaremos educando?, pues lo más seguro que de algunas aulas salgan los futuros maltratadores y asesinos de mujeres. 

jueves, 18 de diciembre de 2014

QUERIDOS REYES MAGOS.......






Queridos Reyes Magos: un año más os escribo una carta, con la esperanza de que éste año, que he sido muy buena, me concedáis en, la medida de vuestras posibilidades, unas cositas sin mucha importancia.
Como entiendo que tendréis muchas cartas que leer la envío con tiempo. Os escribo desde Cartagena, pero la de España, en concreto, junto al Mar Mediterráneo (os doy datos para que no os equivoquéis y los deseos se vayan para Colombia).
Mis hijas dicen algo de cambiar el vestuario, que se aburren al abrir las puertas. A lo lejos escucho a la pequeña decir no sé qué marca de coche. Mi marido dice que a ver si le suben el sueldo porque ya no le da ni para pipas, que está cansado de ser mileurista y sin extras.
Para mí, ¿qué os puedo pedir?  Yo quisiera una espalda nueva, pero va a ser que no. También un trabajo, pero con esto de la crisis y la edad que va teniendo una, creo que tampoco me lo concederéis. Realmente no me hace falta nada en concreto, así que me conformaré con lo que me regaléis. Bueno por si cae, pido un robot de esos que te limpia la casa en un pis-pas.
Pero sí deseo pedir para los demás: os ruego que traigáis oro para los más necesitados de nuestro país, sobre todo para los niños. Que la ilusión que tienen por los juguetes no la pierdan. Que no decaiga ese espíritu navideño ni la ilusión.




Para Rajoy, Sánchez, Iglesias y compañía, pues toneladas de carbón, pero no del dulce. Ya está bien de engañar, manipular, prometer y no cumplir. Que dejen de pelearse entre ellos y esa excitación que ponen la empleen  en hacer cosas positivas para los millones de parados que hay. Que aún seguimos frente a una crisis enorme y sin vías de solución.
Para Luis de Guindos (Ministro de Economía y de Hacienda) a ver si le podéis traer un gran libro de economía, a ver si aprende algo positivo y  arregla algo. ¡Ayssssssssss me olvidaba ¡  deciros que a ver si le podéis agenciar un cinturón que le venga estrecho para que sepa lo que es “apretarse el cinturón”, que los mileuristas  sí sabemos lo que es y no nos queda otra que soportarlo.
Para el actual ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, que no tenga que ir a Urgencias de ningún hospital público, pues no recibirá atención sanitaria a no ser que sea una emergencia. Os ruego que lo iluminéis y que no piense en hacer más recortes pues nuestra sanidad necesita una cura de urgencia de lo pésima que es. No hay ni para tiritas.

Por último te pido que, aunque los jueces se queden sin fiestas, trabajen mucho para que los más de 480 implicados en casos de presentas corrupciones  devuelvan todo que se han llevado y acaben en la cárcel.