Hay relaciones de pareja que han pasado de ser maravillosas
o bonitas, en las que no hay respeto, ni deseo, y en las que se sufre más de lo normal. Muchas
veces es uno de los miembros de la pareja el que está sometido a un desgaste
emocional y físico por tratar de “salvar” esa relación.
Hay
relaciones insanas y que sacan lo peor de uno, cuando tendría que ser lo
contrario. Cuando existen las críticas destructivas, pasividad, insultos (algo que jamás se debe permitir);
cuando tu pareja arruina la gran mayoría de los momentos felices; cuando el
clima en casa pasa de bueno a malo en cuestión de días o sencillamente no eres
bien tratado…aysssssssss estás viviendo una relación tóxica, que no acabará muy
bien. ¿Merece la pena?
¿Por
qué vivir en una espiral pésima en la que sientes que te ahogas? ¿Por qué dejas
que tú autoestima acabe por los suelos y, encima, te sientes culpable de algo
que no sabes muy bien qué es?
María
somatizaba todas esas tensiones (sufría de migrañas, dolores estomacales,
ansiedad, tristeza, llantos…) A nivel emocional no estaba bien, pero, a la vez
que creía estar enamorada de él, quizás las señales fueran de miedo y que
obviaba; a veces sentía rabia y de las que se sentía culpable, pero lo más
doloroso era la decepción y frustración que sentía a su lado, sin embargo….era
incapaz de romper con Mario.
No
entendía por qué seguía viviendo ese drama de pareja. Por más que las personas
que la queremos se lo decimos, ella niega la evidencia y encima, la gran
mayoría de las ocasiones salía en su defensa. Incluso su aspecto físico ha
cambiado, antes era una mujer feliz y ahora ha perdido la alegría y sólo
muestra una cara de amargura.
Cuando
salía sin él se la veía liberada e
incluso contenta. En esos momentos tenía claro que debía acabar con su relación
y hacía planes sin él. No tenía ganas de
volver a casa, pero volvía….El efecto de bienestar o felicidad era
relativamente corto, mientras que la ansiedad
e infelicidad eran más frecuentes… ¿Realmente eso es amor? Cuando amas a
una persona haces las cosas CON amor y no POR amor. ¿Verdad?
Para
mí su pareja es una especie de parásito que se alimenta del otro para
sobrevivir. La hace subir a la luna y bajar a los infiernos en poco espacio de
tiempo. Miente con mucha maestría y la culpabiliza a ella de sus fracasos.
Nunca asume la responsabilidad que tiene en sus actos. No hace absolutamente
nada por cambiar. (Mucho prometer y poco hacer)
Me
consta que ese tipo de parejas pueden estar mucho tiempo juntas. Se han
enquistado y se hacen co-dependientes, con alta tolerancia al dolor y
sufrimiento. María pensaba que ella sería su salvadora, que podría cambiarlo y
fantaseaba creyendo que, ésta vez, todo iría bien..
Es
difícil dejar este tipo de relaciones destructivas, pero se puede…si se quiere
(este es el primer gran paso). Hay parejas que rompen sin más: avisan de que
van a romper toda comunicación y lo
llevan a la práctica por mucho que duela o el otro insista (que lo hará,
prometiéndote que va a cambiar).
Está claro que hay que pasar el “mono” así que
lo mejor es estar con amigos, familiares o hacer actividades en las que no
pienses mucho. Sobre todo hay que
mantenerse firme y no volver.
Otras parejas
acuden a un especialista en éste tipo de problemas y hacen terapia de pareja.
Si de verdad hay amor e intención de que la relación funcione… todo se puede superar.
Yo creo que el amor es libertad, satisfacción, alegría, deseo, empatía,
comunicación, complicidad….si no tienes todo esto en tu relación…
entonces, María no conoces lo que es el
amor